Lindsay (Eliza Eves) visita a su vecino solitario, Sal Baxter (Colby Jansen), para recaudar donaciones para un evento benéfico. El compañero de Sal, Ed Hoskins (Joel Someone), es más acogedor y la invita a entrar. Mientras conducen a Lindsay hacia la casa, indicios sutiles sugieren que sus intenciones son siniestras. A pesar de sentirse nerviosa, Lindsay se siente intrigada por la atmósfera inquietante y la atención de ambos hombres, lo que despierta una compleja mezcla de emociones dentro de ella. La interacción plantea preguntas sobre su relación y sus intenciones hacia ella.