Ty Santana ve un partido de fútbol con su padrastro, Dillon Díaz, cada uno apoyando a un equipo diferente. Ty sugiere una apuesta en la que el perdedor se desnuda después de cada gol, recordando una situación anterior en la que vieron un partido en calzoncillos debido al calor. Dillon, inicialmente reacio pero confiado, acepta. Cuando el equipo de Dillon pierde, termina completamente desnudo, revelando una erección inesperada que lo avergüenza. Ty se declara gay y revela su atracción por Dillon, expresando su deseo de un encuentro sexual. Dillon, sorprendido pero excitado, finalmente acepta ir más allá, lo que lleva a una conexión mutua e inesperada entre ellos.